"Las pruebas norcoreanas no amenazan la seguridad de Rusia, nuestra defensa antiaérea es sólida y capaz de repeler incluso el ataque más poderoso", dijo Bóndarev a Sputnik.
Aseguró que no existe ningún enfrentamiento entre Rusia y Corea del Norte, las relaciones entre las dos naciones son "amistosas y constructivas".
"No veo razones por las cuales Corea del Norte pueda canalizar su poder militar contra nosotros", afirmó el senador.
Explicó que el lanzamiento del misil Hwasong-15 es una señal para EEUU y sus aliados en la región asiática, se trata en particular de Japón y Corea del Sur, para que eviten la escalada de las tensiones en la península de Corea.
A las 03.18 hora local del 29 de noviembre (18.18 GMT del 28 de noviembre), Corea del Norte llevó a cabo un nuevo ensayo de misil balístico, el primero desde el pasado 15 de septiembre, cuando disparó un proyectil identificado por el Pentágono como un misil balístico de medio alcance.
Según la declaración de Pyongyang, el misil alcanzó una altitud de unos 4.500 kilómetros y recorrió unos 960 kilómetros.
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El proyectil, que pasó en el aire unos 53 minutos, cayó en el mar a 210 kilómetros de las costas de Japón.
El 11 de septiembre el Consejo de Seguridad de la ONU aprobó por unanimidad una resolución que endurece las sanciones contra Corea del Norte, sobre todo en el ámbito de los hidrocarburos, en respuesta a su sexto ensayo atómico llevado a cabo el 3 de septiembre.
