"Al conocer la decisión unilateral del presidente de los Estados Unidos de trasladar la embajada norteamericana a Jerusalén y reconocer a esta ciudad como capital del Estado de Israel, la Organización de Solidaridad de los Pueblos de África, Asia y América Latina condena en los términos más enérgicos la decisión que constituye una grave y flagrante violación del Derecho Internacional, así como de las numerosas resoluciones de las Naciones Unidas", expresa el texto circulado a los medios de prensa.
"Esta decisión arbitraria y provocadora, tomada justo cuando se registran avances en el camino hacia la unidad nacional palestina, busca conceder legitimidad a Jerusalén ocupada y a todo el suelo palestino usurpado por el colonialismo sionista", agrega el escrito.
La organización de solidaridad tricontinental considera que la decisión tomada por Trump atenta contra la posibilidad de retomar las negociaciones de paz, las cuales ya acumulan cinco lustros sin resultados, troncha la oportunidad de resolver el conflicto israelí-palestino y resulta una ofensa a los pueblos árabes e islámicos.
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Advierte la Ospaaal que el proceder de Washington influirá de manera muy negativa sobre la estabilidad y la seguridad del Medio Oriente, por lo que el secretariado de la organización insta a sus filiales a expresar en forma enérgica su repudio al camino emprendido en este tema por la Casa Blanca.
Ayer, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba expresó su más profunda preocupación y rechazo por la declaración unilateral por parte del Presidente de EEUU de la ciudad de Jerusalén como capital de Israel, lo que constituye una grave y flagrante violación de la Carta de la ONU, del Derecho Internacional y de las resoluciones pertinentes de las Naciones Unidas.
"Esta intención del Gobierno de los Estados Unidos de modificar el estatuto histórico de Jerusalén vulnera los intereses legítimos del pueblo palestino y de las naciones árabes e islámicas, provocará graves consecuencias para la estabilidad y la seguridad en el Medio Oriente, aumentará aún más las tensiones en esta región e impedirá cualquier esfuerzo encaminado a reanudar las conversaciones de paz entre israelíes y palestinos", advirtió la Cancillería.
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La Cancillería ratificó que Cuba continuará apoyando una solución amplia, justa y duradera para el conflicto palestino-israelí, sobre la base de una solución de dos Estados, que permita a los palestinos el derecho a la libre determinación y a disponer de un Estado independiente y soberano, con su capital en Jerusalén Oriental y las fronteras previas a 1967.
