El coronel Jay Flottmann combina dos áreas de conocimientos muy distintas: la de piloto de cazas y la de médico. Por esa razón en el Ejército de EEUU a ese tipo de personas les llaman 'unicornios', escribe el medio estadounidense.
Para hacerlo, voló en tres F/A-18 Hornet, dotados con diferentes sistemas de respiración: uno con el sistema LOX —de generación anterior— y dos con el más moderno OBOGS, destinado para los F-35.
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Su conclusión previa: el OBOGS suministra una sobredosis de oxígeno en el sistema de respiración durante las cargas superiores, lo que afecta negativamente el rendimiento del piloto.
Además de recomendar una revisión más profunda de estos dos aspectos, Flottmann, sin embargo, subrayó que sus tres vuelos no son suficientes para encontrar la razón del problema.
La privación de oxígeno en pleno vuelo afecta a los cazas F/A-18 y F-35 hasta que el Pentágono solicitó cesar los vuelos de algunos de los aviones para investigar las causas. No obstante, la explotación de las aeronaves se reinició sin encontrar ni solucionar el problema.
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