Ni la nieve que caía, ni los termómetros que marcaban un grado bajo cero, hicieron desistir a los participantes del evento deportivo ruso.
Entre los corredores había personas entre 4 y 80 años de edad y todos llevaban puesto el tradicional traje de Papá Noel.
La distancia de la carrera para adultos fue de 2,5 kilómetros y de 1 km para niños.
Además de los residentes de San Petersburgo y de otras ciudades de Rusia, ciudadanos de Alemania, Japón, Francia, Reino Unido, Italia, Brasil, Canadá, Finlandia, Turquía, Austria, Bielorrusia, Kazajistán y Ucrania también participaron de la carrera.