"Rosenstein excedió la autoridad (…) con su pretensión de otorgar al consejero especial Robert S. Mueller III jurisdicción original para examinar cualquier nuevo asunto que se le presente en el transcurso de la investigación, sin solicitar ni obtener aprobación del fiscal general o del fiscal general en funciones", dice el texto del litigio.
Manafort denuncia asimismo en su litigio que la investigación de Mueller y su procesamiento resultante exceden la autoridad que se le concedió porque el consejero realizó una pesquisa sobre los negocios del acusado que no se relacionaban con el asunto central, la supuesta colusión de la campaña electoral de Trump con Rusia.
Manafort y Gates fueron puestos bajo arresto domiciliario y la fiscalía pidió una fianza de 10 millones de dólares para el primero y de cinco millones para el segundo.
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El 16 de diciembre la justicia decidió levantar la prisión domiciliaria a Manafort, pero lo obligó a usar una tobillera electrónica, cumplir toque de queda y entregar sus pasaportes.
Agentes del FBI requisaron el domicilio de Manafort el 26 de julio, utilizando una orden de allanamiento para incautar documentos y otros materiales como parte de la investigación sobre la supuesta injerencia de Rusia en las elecciones nacionales de EEUU celebradas en noviembre de 2016.
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Tanto Trump como el Gobierno de Rusia han desmentido esas acusaciones.
