El nuevo intento de motín se pudo frenar gracias a la "rápida acción de las fuerzas especiales de seguridad pública, basadas en informaciones del servicio de inteligencia", informó en un comunicado la Dirección General de Administración Penitenciaria de ese estado.
Detentos de Goiânia fazem terceira rebelião em menos de uma semana https://t.co/bFo5VWhpCM pic.twitter.com/8MTf7qC5mj
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A pesar de que esta vez no hubo muertos ni heridos, sí se registraron focos de incendios, que fueron rápidamente apagados por el cuerpo de Bomberos.
El intento de motín se produjo alrededor de las 4.30 hora local (7.30 GMT) en el centro Odenir Guimarães, cerca de los pabellones de la colonia agroindustrial de régimen semiabierto donde ocurrió el primer motín.
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Además de muertos y heridos, los incidentes del 1 de enero provocaron la huida de 242 presos, de los cuales 87 siguen forajidos, según el último balance divulgado el jueves por las autoridades.
Nova rebelião atinge outra unidade do Complexo Prisional de Aparecida de Goiânia — https://t.co/ne3uHJDFN9 pic.twitter.com/R1P6Xuz5q7
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El Tribunal de Justicia de Goiás publicó el jueves un informe que apuntaba a la falta de prevención y a las malas condiciones de la cárcel como factores que propiciaron la rebelión, que en principio se originó por una pelea entre presos de bandas rivales.
Tras el motín, el Gobierno de Goiás anunció algunas medidas de emergencia, como la contratación de 1.600 vigilantes de prisiones temporales o la puesta en marcha de cambios legislativos para dotar a las cárceles de autonomía administrativa.
