"No me postularé para presidir otra vez esta cámara", dijo Forcadell en una rueda de prensa ofrecida para explicar su decisión.
En los últimos meses, Forcadell se convirtió en una de las caras más visibles del proceso independentista catalán a nivel institucional.
Desde entonces, su desempeño estuvo rodeado por la polémica al permitir el debate y la tramitación de las distintitas resoluciones y leyes desplegadas por el independentismo catalán como parte de su proceso soberanista.
Lea más: El rompecabezas catalán, en un callejón oscuro
Como consecuencia, Carme Forcadell tiene múltiples causas judiciales abiertas, siendo especialmente relevante su presencia en la macrocausa que instruye el Tribunal Supremo de España contra más de una veintena de líderes independentistas catalanes por delitos de rebelión, sedición, malversación y sus conexos.
Pese a los problemas judiciales derivados de su actuación, la líder independentista dijo este jueves estar orgullosa de su trabajo y reiteró que "el único límite para debatir un tema en un Parlamento deben ser el respeto a los derechos humanos".
Según explicó, su decisión de no postularse de nuevo al cargo es "personal" y "no tiene nada que ver con otras personas".
Lea también: Rajoy espera que en Cataluña pronto se forme un Gobierno que acate la ley
En cambio, Forcadell no renunciará a su acta de diputada y se integrará como una parlamentaria más de Esquerra Republicana de Cataluña, el segundo partido más votado dentro de las tres formaciones que conforman la mayoría independentista en la cámara.
