La acción fue evitada luego de que unidades militares "observaron personas cerca de la torre 236, ubicada en la vereda La Concha del municipio de Campamento, norte de Antioquia, y procedieron a hacer un barrido del área, encontrando un cilindro bomba", señaló el Ejército en un comunicado.
De haber explotado el cilindro se habría "perjudicado no solo la economía de una gran porción territorial del noroeste de Colombia", sino también a los pobladores residentes en las subregiones vecinas, apuntó el Ejército.
La desactivación del explosivo se produjo luego de que en la noche del jueves 11 el ELN asesinara a dos policías en el municipio de Arauca (en límites con Venezuela).
Lea también: Países garantes piden al Gobierno de Colombia y al ELN que retomen negociaciones
El 12 de enero, en diálogo con la emisora local Caracol Radio, el ministro de Defensa, Luis Carlos Villegas, señaló que catorce atentados por parte del ELN se han registrado en el país desde que en la medianoche del martes 9 terminó el cese del fuego bilateral que esa guerrilla mantenía con el Gobierno desde el pasado 1 de octubre.
Villegas precisó que las regiones más afectadas por la escalada de atentados del ELN son Arauca y Catatumbo, en el departamento de Norte de Santander (nordeste).
Aunque el Gobierno ha sostenido que los diálogos no están suspendidos, aún se espera la reanudación de las negociaciones.
El tema será evaluado este fin de semana en conjunto por el presidente colombiano, Juan Manuel Santos, el jefe de la delegación de paz del Ejecutivo, Gustavo Bell, y el secretario general de la Organización de las Naciones Unidas, Antonio Guterres, quien visitará Colombia el 13 y el 14 de enero, tras lo cual se espera una declaración sobre los pasos a seguir.