Los senadores consideran que ciertos medios controlados por las autoridades chinas —en particular, Xinhua, China Daily y CCTV— "difunden propaganda tanto dentro del país como al nivel internacional".
"Creo que la propuesta de los senadores estadounidenses es imprudente. Es insensata en la misma medida que la prescripción de registrarse como agente extranjero enviada a los medios rusos. El empeoramiento de las relaciones entre Estados Unidos y Rusia así como las tensiones políticas entre ellos no deben tener ningún efecto sobre medios de comunicación de los dos países", indicó el periodista.
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A su entender, la lógica de Estados Unidos se tergiversa, mientras todo el problema está mal planteado desde el principio. Si medidas antedichas se aplican contra los medios chinos, esto resultaría en nuevas tensiones entre Washington y Pekín.
Esto carece de sentido común, sin mencionar el hecho de que no corresponda a los principios de la diplomacia y del funcionamiento de los medios, subrayó.
"Los medios estadounidenses no tienen una reputación impecable y a menudo crean noticias falsas, a lo que frecuentemente se refiere el presidente del país, Donald Trump", enfatizó en un comentario a Sputnik el director del Instituto de investigación de información y medios de comunicación de la Academia de Ciencias Sociales de China Zhang Shuhua.
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"Estados Unidos siempre busca puntos débiles e imperfecciones en otros países, especialmente en China. [Washington] echa leña al fuego en lo que se refiere a problemas internacionales cada vez más a menudo, tergiversan la verdad", dijo el analista.
"EEUU ya se ha convertido en una especie de 'destructor del orden mundial'. De esta manera los politicastros norteamericanos tratan de llenar el hueco creado por la división en su política interior, por eso apuntan su 'arma' en busca de un enemigo externo", añadió el entrevistado.
La Ley de Registro de Agentes Extranjeros (FARA, por sus siglas en inglés) se aprobó por el Congreso de Estados Unidos en 1938 e inicialmente estaba destinada contra la propaganda nazi. Últimamente dicho acto se ha utilizado por las autoridades del país norteamericano para limitar el funcionamiento de medios extranjeros.
En particular, el Departamento de Justicia de Estados Unidos obligó a la cadena RT America a registrarse como 'agente extranjero' en noviembre de 2017.
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