"Ya va siendo hora de superar una guerra de banderas", dijo Iglesias en una entrevista con la Cadena SER.
En ese sentido, se instó tanto al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, como al líder independentista y previsible candidato a la investidura en Cataluña, Carles Puigdemont, a "empezar a hablar de los problemas de la gente".
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"No podemos volver a tolerar que la agenda social desaparezca del primer plano y que el tema principal sea una absurda guerra de banderas. Lo importante son las cosas de comer", insistió.
Preguntado ante la posibilidad de que Carles Puigdemont —cabeza de lista de la candidatura Junts Per Catalunya, la más votada entre las fuerzas independentistas— sea investido presidente de manera telemática, Iglesias volvió a manifestar su rechazo a esa opción.
"Puigdemont no puede ser presidente desde Bruselas", opinó sobre el expresidente catalán.
En las últimas semanas, los partidos independentistas pusieron sobre la mesa la posibilidad de investir al líder independentista de manera telemática ante la previsión de que este pueda ser detenido si se desplaza a España.
Esta opción es rechazada por todas las fuerzas no independentistas del Parlamento de Cataluña, así como por los servicios jurídicos de la cámara y por el Gobierno de España, que anunció su intención de recurrir la investidura ante la justicia si no es presencial.
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El secretario general de Podemos también afirmó, con motivo del cuarto aniversario de la formación progresista española, que el partido consiguió hacer cosas "inimaginables" en su corta vida.
"Nacimos hace cuatro años, y nos han querido dar por muertos muchas veces, pero hemos conseguido algo inimaginable", afirmó Iglesias en una entrevista con la Cadena SER.
Pese a ello, en los últimos días los líderes de la formación insistieron en destacar algunos de los éxitos del partido.
Podemos fue la tercera fuerza más votada en las dos últimas elecciones generales, juega un papel destacado en algunos de los parlamentos regionales y, sobre todo, consiguió alcanzar —a través de coaliciones municipalistas— la alcaldía de Madrid y Barcelona.
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Precisamente, la relación de Podemos con otros actores de izquierda —sobre todo con su socio Izquierda Unida— es uno de los temas que más polémica están generando en este cuarto aniversario.
En su entrevista con la Cadena SER, Iglesias llamó a superar "la guerra de banderas" que monopolizó el debate político en España en las últimas fechas por la crisis en Cataluña para volver a poner "la agenda social en el centro del debate".
Distintos actores apuntaron de manera insistente que la posición de Podemos en Cataluña, donde la formación rechaza los caminos unilaterales para la independencia pero al mismo tiempo critica el inmovilismo y el rechazo del Gobierno central a un referéndum, es uno de los motivos de su descenso en las encuestas.
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La incómoda posición de Podemos en Cataluña fue definida por uno de los fundadores de la formación, Íñigo Errejón, a través de la ya popular frase "es un partido entre el Real Madrid y el FC Barcelona en el que vamos con el árbitro".
Según explicó, la ley que presentará Podemos pretende aumentar la recaudación del Estado en 6.000 millones de euros para dedicar ese dinero a ayudas a dependientes.