"Entre el 1 de enero y el 31 de diciembre, la UNAMA detectó 10.453 civiles afectados (3,438 muertos y 7.015 heridos)", dice el texto del informe.
Se precisa que muchos afganos sufrieron lesiones a causa de terroristas suicidas o del uso de cualquier tipo de explosivos improvisados, así como de enfrentamientos militares entre varios grupos armados y las tropas gubernamentales.
Según el informe de la Unama, el número de mujeres afectadas en 2017 se estima en 1.224 personas (359 muertas y 865 lesionadas) lo que muestra un leve crecimiento (menos que el 1%) comparando con la cifra correspondiente de 2016.
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Además, se informa que niños representan el 30% de los afganos afectados en 2017, es el 10% menos que en 2016, y el número de muertes y lesiones entre menores de edad se estima en 861 y 2.318, respectivamente.
