Democracia vs soberanía
Esta decisión provocó una ola de indignación en Occidente. El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Zeid Raad Husein, lo calificó como "un asalto total a la democracia".
Sin embargo, Rusia, China y Arabia Saudí bloquearon los intentos de colocar a las Maldivas en la agenda oficial del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (ONU).
"El Consejo de Seguridad de la ONU estaba discutiendo qué medidas tomar contra las Maldivas, pero las discusiones no fueron oficiales. Luego pasaron a incluir a Maldivas en su agenda oficial. Pero ese movimiento fracasó. Nuestra política exterior también salió victoriosa. Esto fue posible gracias a los esfuerzos de nuestros amigos más cercanos: China, Rusia y Arabia Saudí", explicó Yameen, citado por el periódico local Avas.
El portavoz del Ministerio de Exteriores de China, Geng Shuang, aseguró que la crisis actual en este archipiélago del océano Índico es una cuestión interna, es más, según él, la comunidad internacional debe respetar la soberanía y la integridad territorial de las Maldivas.
La prensa asiática recoge que la crisis maldiva ha tenido un impacto a nivel internacional.
Moscú y Malé
Los propios maldivos explicaron al corresponsal de Sputnik que sienten una gran gratitud hacia Rusia por su papel en la ONU.
"Los chinos nos ayudan a reconstruir el aeropuerto internacional en Malé, tienen muchos proyectos económicos en nuestro país, pero Rusia no. Hizo lo que hizo en la ONU por amistad", aseguró un habitante de una isla rural al sur de Malé.
Además, el interlocutor de Sputnik subrayó que Rusia no solo valora mucho la soberanía de las Maldvias, sino que también —junto a Arabia Saudí y Turquía— entiende perfectamente el importante papel que juega el islam en la vida de este país asiático y siempre ha tratado con respeto este tema.
¿Otra cuenta para el Collar de Perlas?
Para el politólogo ruso Guevorg Mirzayán, el caos político en las Maldivas amenaza no solo a los turistas, sino también al equilibrio de poder en todo el sur de Asia.
"Y todo porque las islas son estratégicamente importantes para las dos superpotencias regionales: la India y China"
Este archipiélago de 1.200 islas se encuentra en la intersección de las rutas comerciales. "Aquellos que las controlan pueden controlar el tránsito de mercancías a través del océano Índico entre el este de Asia, por un lado, y Oriente Medio, África y Europa, por el otro", explica Mirzayán.
"Se esfuerza por la diversificación a través de contactos con chinos y saudíes. A los indios, sin embargo, les preocupa esa diversificación, como cualquier conflicto político en el que China esté involucrada. Delhi quiere mantener el control político total sobre las Maldivas", explicó a Sputnik Alexéi Kupriánov, del Instituto de Economía Mundial y Relaciones Internacionales de la Academia Rusa de Ciencias.
Por ejemplo, las Maldivas se convirtieron en el único vecino de la India que el primer ministro indio, Narendra Modi, no ha visitado desde su llegada al poder en 2014.
"La clase dirigente india teme seriamente que tal diversificación conduzca a la creación de una base naval china en las Maldivas que se convierta en otra cuenta en el llamado Collar de Perlas, una cadena de bases en el océano Índico que debe proteger las rutas comerciales chinas", concluye Mirzayán.