"Queremos relaciones estrechas y cooperativas con nuestros vecinos dentro y fuera de la UE basadas en nuestros valores de internacionalismo, solidaridad e igualdad, además de beneficio mutuo y comercio justo", señaló.
La cooperación que propone Corbyn se extiende también a la defensa de forma que "la diplomacia y la negociación" prevalezcan sobre el "uso de la acción militar unilateral".
Para el líder laborista, la solución pasa por una "genuina cooperación internacional que haga frente a las causas fundamentales del conflicto, la persecución y la desigualdad".
El dirigente recordó en su intervención que la constitución del Partido Laborista "incluye el compromiso de respaldar a la ONU" y la "promesa de asegurar la paz, la libertad, la democracia, la seguridad económica y la protección medioambiental".
Lea tambien: El laborismo de Corbyn se afianza en Londres
"La crisis global de refugiados es enorme, hay 65 millones, casi tantos como la población de Reino Unido, y la mayoría están en las fronteras de Europa", añadió.
A nivel doméstico —y distanciándose del Gobierno conservador— apostó por un pacto aduanero con la UE para evitar aranceles comerciales y la reintroducción de la frontera en la isla de Irlanda que se desmanteló tras el final de la lucha armada del IRA y los grupos lealistas protestantes.
"El laborismo intentará negociar una nueva e integral unión aduanera entre Reino Unido y la UE para asegurar que no haya aranceles con Europa y ayudar a evitar la necesidad de una frontera dura en Irlanda del Norte", confirmó.
En la negociación del acuerdo aduanero, los laboristas reclamarían el derecho de Reino Unido a contribuir en establecimiento de normativas internas y en los contratos con terceros países o bloques.