Con lemas como '¡Sí se puede pasar!' por la frontera y 'Trump, persona non grata' cientos de activistas, políticos y funcionarios se congregaron en el centro de San Diego antes de que se celebrasen las marchas a favor y en contra del muro fronterizo que el presidente ha prometido construir. De todo el país, es precisamente San Diego el área que más arrestos de indocumentados registra por parte del servicio de inmigración.
La política de mano dura de Trump contra la inmigración ha generado un fuerte rechazo en California, el estado más poblado de EEUU y en el que casi la mitad de la población es de procedencia latina.
"Él [Donald Trump] quiere poner su muro ahí. No es por nada más que por racismo. Queremos que sepa que no es bienvenido aquí en San Diego. Nosotros estamos aquí protestando contra él y su muro", declaró el congresista demócrata Juan Vargas a la cadena Telemundo.
Trump llega al sur de California para inspeccionar los ocho prototipos de su "gran y hermoso muro fronterizo" con México. Se prevé, además, que ofrezca un discurso ante los marines desplegados en San Diego y asista a una recaudación de fondos en Los Ángeles.
'Guerra migratoria' entre California y la Casa Blanca
La estrategia migratoria de Donald Trump ha causado un choque entre el Gobierno federal y las autoridades del 'estado dorado'. El viaje de Trump se produce apenas días después de que el Departamento de Justicia presentara una demanda para bloquear las leyes de California que dan amparo a los indocumentados.
Thomas Homan, director interino del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de EEUU, arremetió contra la senadora por ese estado, Dianne Feinstein, y la líder de la minoría demócrata en la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, también de California. Homan dijo que los comentarios de Pelosi sobre los agentes federales que aterrorizan a las comunidades de inmigrantes estaban "fuera de lugar", al tiempo que desafió a Feinstein a cambiar las leyes si no estaba de acuerdo con la forma en que su servicio las hacía cumplir.
En una carta abierta dedicada al presidente, el gobernador de California, Jerry Brown, dijo que su estado está "enfocado en construir puentes y no muros". En la misiva, Brown defiende la diversidad de un territorio que por sí solo es la sexta economía más grande del mundo.
"Nuestra prosperidad no se basa en el aislamiento. Todo lo contrario. California prospera porque recibimos inmigrantes e innovadores de todo el mundo", dice el gobernador.
Por su parte, el fiscal general de California, Xavier Becerra, que ha demandado al Gobierno de Trump más de veinte veces en el último año, dijo que espera que el presidente entienda las lecciones que se pueden extraer de la economía del estado, sus estrictas leyes de control de armas de fuego y su protección ambiental. Becerra prometió seguir luchando contra los esfuerzos dirigidos a "hacernos ir hacia atrás".
