La Isla entera se preparó para su llegada: retratos del cosmonauta con banderas de la entonces Unión Soviética (URSS) adornaban las principales avenidas de la capital cubana. Gagarin había sido invitado al multitudinario acto que cada 26 de julio el Gobierno cubano celebra cada año en la Plaza de la Revolución.
Una guardia militar realizó los honores de bienvenida y Gagarin descendió por la escalerilla de Aeroflot vestido de blanco impecable y sonriente. Cientos de capitalinos saludaron al visitante congregados a lo largo de la Avenida Rancho Boyeros que comunica el aeropuerto con el centro de la ciudad.

Su llegada hizo que los cubanos se sintieran parte de ese 12 de abril de 1961 cuando Gagarin en la pequeña Vostok 1, hizo realidad la conquista del espacio, uno de los sueños más anhelados por las potencias de aquellos tiempos.

El hecho fue reconocido mundialmente como un logro extraordinario de la técnica y la ciencia soviéticas, 16 años después de que la URSS venciera al fascismo. La prensa soviética reflejó el interés de Gagarin por Cuba tras su regreso a 'tierra firme' como si el cosmos fuera una ambición menor.
El 26 de julio asistió al acto conmemorativo del VIII aniversario del asalto a los cuarteles Moncada y Carlos Manuel de Céspedes, en la Plaza de la Revolución. Allí, el presidente Dorticós condecoró a Gagarin con la más alta distinción existente en Cuba hasta ese momento: la Orden Nacional Playa Girón.

"Al realizar la histórica hazaña que lo consagra como el primer cosmonauta del mundo, ha contribuido con ejemplar heroísmo al progreso de la humanidad y a la paz", destacó el presidente cubano.
Según la publicación, Yuri tomó los micrófonos para expresar su agradecimiento y en presencia de Castro habló de otro deseo: "Yo estoy seguro de que no está lejos el tiempo en que al cosmos volarán los cosmonautas cubanos, (…) para en esta rama contribuir al progreso de la humanidad".

Sin embargo, Gagarin murió el 27 de marzo de 1968 durante un vuelo de entrenamiento, sin ver cumplido su anhelo. La noticia conmovió de tal modo a Castro que en septiembre de 1980, cuando el primer representante de Cuba y América en el cosmos, Arnaldo Tamayo Méndez regresó del espacio, recibió la orden de no volver a manejar un avión militar.
#Cuba#Fidel y Yuri Gagarin, un lazo que perdura en la historia @cubadebate #CubaEsNuestra #Siemprees26#PorCuba y #ConCuba #Venceremos pic.twitter.com/LfY1jNxJ3c
— Natalia (@nataliauci16) 24 de julio de 2017
Desde entonces Tamayo sólo puede tomar vuelos comerciales como pasajero, sin embargo, la sonrisa de este cosmonauta cuando habla de su viaje al espacio es lo más cercano a Gagarin que tienen los cubanos.
Otorgan Medalla de la @UNESCO a General de Brigada Arnaldo Tamayo Méndez, primer cosmonauta de #Cuba │@robertoesquive9 @chamberohoy pic.twitter.com/uTVKSdIGww
— Julio Riveron (@CubaJulioR) 13 de octubre de 2017