"Sería razonable suponer que la presencia de nuestro país en Siria se mantendrá mientras sea necesaria a las autoridades legítimas sirias y al pueblo amigo sirio", aseguró en una entrevista con Clarín al indicar que "la misión de Rusia en Siria todavía no ha acabado".
Lavrov insistió en que "los militares rusos se encuentran en el territorio sirio desde el otoño de 2015 por invitación del gobierno legítimo de la República Árabe Siria que solicitó la asistencia de Rusia para luchar contra el terrorismo, estabilizar la situación en el país y crear condiciones para una resolución política de la crisis aguda y prolongada".
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"Muchos de los objetivos y metas establecidos han sido logrados con éxito", señaló.
El diplomático recalcó que "nuestro país ha contribuido de forma decisiva a la derrota del foco político y militar de terrorismo representado por Daesh (autoproclamado Estado Islámico, proscrito en Rusia y otros países)".
Rusia comenzó una operación antiterrorista en Siria en septiembre de 2015 a solicitud de Damasco.
El 11 de diciembre de 2017, el presidente ruso, Vladímir Putin, ordenó el repliegue del contingente ruso de Siria al dar por cumplida su misión: preservar a Siria como un Estado soberano e independiente y crear las condiciones para una resolución política de la crisis en el país bajo los auspicios de la ONU.
La coalición internacional encabezada por EEUU intervino en Siria en 2014 sin autorización de Damasco ni tampoco el visto bueno del Consejo de Seguridad de la ONU.
El pacto nuclear
Rusia aprecia que Irán no se retirase del Plan de Acción Integral Conjunto (PAIC), después de que lo hiciera EEUU, dijo el ministro ruso.
"Consideramos que es de importancia fundamental que Irán decidiera no complicar aún más la situación y siguiera cumpliendo estrictamente sus obligaciones respecto a la comunidad internacional", declaró.
Lavrov volvió a lamentar la decisión del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de abandonar el pacto, así como la de restablecer las sanciones contra el país persa.
"Una vez más, Washington actúa en contra de la opinión de la mayoría de los Estados del mundo, exclusivamente en su propio interés, violando groseramente las normas del derecho internacional", comentó al indicar que tal decisión perjudica la seguridad y estabilidad global y regional.
El canciller ruso expresó la esperanza de que la salida de EEUU del PAIC "no esté relacionada con los planes de atacar Teherán o cambiar el régimen allí".
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Además, confió en que todavía existe una posibilidad de que la solución al grave problema internacional —fruto de muchos años de duro trabajo— "no sea reducida a la nada".
"Estamos abiertos a la interacción en interés del PAIC y orientados al fomento de la cooperación mutuamente provechosa con Teherán", concluyó Lavrov.
El 8 de mayo pasado Trump anunció la retirada de su país del PAIC, el acuerdo firmado en 2015 por Irán y Rusia, Estados Unidos, el Reino Unido, China, Francia, Alemania y la jefa de la diplomacia europea, Federica Mogherini.
El líder estadounidense, quien también ordenó restablecer "al máximo" las sanciones contra Irán, justificó la medida acusando a Teherán de seguir desarrollando armamento nuclear, pese a que tanto el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), como el resto de los firmantes del acuerdo, aseguran lo contrario.
Los participantes actuales del acuerdo se esfuerzan en coordinar sus medidas para mantener el pacto nuclear.
El Grupo de los 20
El Grupo de los 20 debe continuar siendo una herramienta eficaz para afrontar las crisis financieras y económicas, dijo Serguéi Lavrov.
"No hay duda que el Grupo de los 20 debe seguir siendo un mecanismo eficaz para responder a las crisis financieras y económicas", declaró.
Lavrov subrayó que al mismo tiempo existe en el foro una "obvia correlación entre la política y la economía mundiales" que determina "el carácter de largo aliento de las decisiones" tomadas.
"Es natural que el Grupo de los 20 discute de un modo cada vez más profundo problemas como el fomento del desarrollo, el cambio climático, la lucha contra el terrorismo y la corrupción, la migración y los refugiados, la seguridad de la información internacional", aseguró.
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El diplomático indicó que Rusia espera que la próxima cumbre de los cancilleres del G20 a la que asistirá el 20 y 21 de mayo en Buenos Aires contribuya "de manera significativa a la preparación de la cumbre de los líderes".
"Necesitamos soluciones a nivel mundial que sean formuladas sobre la base del principio de multilateralismo y tomen en cuenta los intereses de todos los países sin excepción alguna", insistió al afirmar que es necesario centrarse "en las prioridades del desarrollo para toda la humanidad en vez de para unos pocos".
La crisis coreana
Rusia espera que Estados Unidos continúe con un papel constructivo en la solución de la crisis coreana, declaró el ministro ruso.
En este contexto, Lavrov expresó su esperanza de que sea esencial la reunión entre el presidente estadounidense, Donald Trump, y el líder norcoreano Kim Jong-un, programada para el 12 de junio en Singapur.
"Si las partes se abstienen de plantear exigencias a todas luces inaceptables y expresan su voluntad de dialogar de manera mutuamente respetuosa, la desnuclearización de la península de Corea tendrá buenas perspectivas", añadió.
El ministro ruso recordó que Rusia siempre ha abogado por la normalización de las relaciones entre las dos Coreas, que puede lograrse por vía política y diplomática.
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Lavrov destacó el éxito de las históricas negociaciones entre Seúl y Pyongyang del pasado 27 de abril, que desembocaron en la Declaración de Panmunjom, que "consagra los principios básicos de coexistencia pacífica de los dos Estados, así como el deseo de desarrollar las relaciones y desnuclearizar la península mediante el esfuerzo común".
Rusia, por su parte, señaló el diplomático, ofrecerá la contribución necesaria para que se implementen los acuerdos intercoreanos.
Unión Económica Euroasiática y Mercosur
El memorando de cooperación de la Unión Económica Euroasiática y el Mercado Común del Sur se encuentra en la etapa final de su preparación, afirmó Lavrov.
"Suponemos que el memorando está de hecho en la fase final de la preparación y puede ser firmado en un futuro próximo", dijo Lavrov.
"Creemos que una de las direcciones importantes regionales es establecer contactos entre la Unión Económica Euroasiática y los Estados de América Latina", dijo.
Añadió que Rusia apoya "el establecimiento de una asociación de diálogo entre los cinco países eurasiáticos y el Mercosur mediante un memorándum de cooperación que abarca como el comercio y las inversiones, energía, desarrollo científico y tecnológico, finanzas, transporte, comunicación, agricultura, turismo y las tecnologías de la información y las comunicaciones".
La UEE es la mayor alianza económica del espacio postsoviético, lanzada en enero de 2015 e integrada por Armenia, Bielorrusia, Kazajistán, Kirguistán y Rusia.
Mercosur, fundado en 1991, establece una unión aduanera y el mercado común entre Argentina, Brasil, Uruguay y Paraguay, abarcando a una población cercana a los 250 millones de personas y responsable de más del 75% del PIB total del continente sudamericano.