"Cada vez que se hace una travesía en el Estrecho de la Florida, debido a las fuertes corrientes siempre se producen marejadas y eso trae como consecuencia que el esfuerzo físico de los remeros será mucho mayor y tendrán que ir corrigiendo el rumbo constantemente", comentó a Sputnik el especialista deportivo Carlos Bandines.
Los tres atletas zarparon a la 06:30 hora local (10:30 GMT) de la rada del Club Náutico Internacional Hemingway, en el litoral norte de La Habana, con el objetivo de enviar un mensaje de amistad que una a los pueblos de ambas naciones.
Las tres pequeñas embarcaciones de cinco metros de largo van guiadas por un bote catamarán, que definirá la ruta a seguir hasta arribar a Cayo Hueso, en el estado estadounidense de Florida.
En una conferencia de prensa efectuada el 25 de mayo, los remeros estadounidenses coincidieron en que "lo más importante es que transmitamos un mensaje de amor para que cambie el clima político, y realizar este reto deportivo sirve también para llevar un mensaje de paz a los Estados Unidos y ayudar a un acercamiento entre ambos países".
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El año pasado hubo un intento similar, que fracasó poco antes de llegar a la costa de EEUU por el estado desfavorable del mar.