"Las condiciones climáticas y las derivadas del material aún caliente depositado en el área de afectación no son las adecuadas para preservar la integridad física de los socorristas", informó la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred), según recoge la Agencia Guatemalteca de Noticias.
Asimismo, la Conred recomendó a la población "no acercarse al lugar y atender las recomendaciones de las autoridades", ya que en el lugar "pueden ocurrir explosiones" y con las lluvias "pueden descender lahares por el material depositado en las barracas".
Las autoridades instalaron un Puesto de Monitoreo que evaluará de forma constante la situación en la zona hasta que las condiciones permitan el reingreso de los rescatistas.
Además, entre 200 y 300 personas siguen desaparecidas, según diversas fuentes oficiales, y más de 12.000 fueron evacuadas.
Las autoridades mantienen en alerta roja la región en torno del volcán, que sigue activo y lanzando lava, cenizas incandescentes y gases a elevadas temperaturas.