La Comisión de Helsinki dependiente del Gobierno Federal de EEUU sugirió en un informe sobre el venidero Mundial de Fútbol de Rusia que la FIFA debería organizar la ceremonia de la entrega de la copa en territorio neutral fuera del país sede, reportó Russia Today.
"En un ideal, la FIFA debería organizar la ceremonia de entrega de la copa en un territorio neutral fuera de Rusia", señala el informe citado por el medio de prensa.
Según el documento, "pese a los esfuerzos de una serie de funcionarios estadounidenses por que la FIFA eligiera otro país sede para celebrar el Mundial de Fútbol, en una etapa tan avanzada no quedan prácticamente oportunidades para que esto suceda".
Tradición en boicot
A esta actitud se sumaron Australia, Polonia y Dinamarca.
La excusa fue la supuesta huella en el envenenamiento del exagente ruso Serguéi Skripal en marzo pasado.
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Nada más abierta la investigación, que según Scotland Yard podría prolongarse por varios meses, el Gobierno británico responsabilizó a Moscú de estar detrás del envenenamiento de los Skripal.
Uno de los boicots de eventos deportivos más célebres, quizás el primero de gran envergadura, fue el promovido por Washington contra las Olimpiadas de Moscú en 1980, esgrimiendo como excusa la supuesta invasión a Afganistán, desplante que fue respaldado por más de 50 países y provocó la respuesta soviética durante los Juegos de 1984.
Revisando archivos: escándalos en torno a la FIFA
El Mundial de Rusia ha estado bajo el fuego de sus detractores casi desde su otorgamiento.
La secretaria general de la FIFA, Fatma Samoura, aseguró a mediados de 2017 que las sedes de los Mundiales de Rusia 2018 y Catar 2022 no están en duda, ya que no veía pruebas concluyentes de una trama de corrupción.
"No hay ninguna base sólida para poner en cuestión la entrega de los Mundiales de Rusia y Catar", señaló la senegalesa.
En mayo de 2015 el presidente ruso, Vladímir Putin, expresó que las maniobras contra Blatter eran un intento de quitarle el Mundial a Rusia.
"Somos conscientes de la presión que se ejerció sobre él para prohibir el Mundial de la FIFA 2018 en Rusia", señaló.
A principios de año, Travis Tygart, director de la Agencia Antidopaje de Estados Unidos, calificó la aparente inacción de la FIFA de "exasperante".
Craig Reedie, presidente de la WADA, afirmó que esperaba que la FIFA descubriera cualquier acusación de corrupción y actuara firmemente.
"Les proporcionamos toda la información que tuvimos en ese momento y les dijimos que debían ser responsables de poner manos a la obra con el manejo de los resultados", señaló.
Ante estas acciones, la FIFA divulgó detalles de la investigación que no condujo a evidencia alguna de dopaje entre los futbolistas rusos.
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Torneo alternativo
Según la propuesta, en este torneo alternativo participarían equipos como Holanda y Chile que no superaron la fase de eliminatorias.
Sin embargo los expertos advierten que la FIFA no permite la celebración de competencias durante las mismas fechas en las que se celebra un Mundial.
El experto estadounidense Michael Lewis declaró a BBC Sport que esta propuesta era "una idea para hacer dinero".
Deporte vs política
Por su parte, el presidente francés Emmanuel Macron rechazó la posibilidad de un boicot a la celebración del evento deportivo, desautorizando las voces que, en algunos países de Europa, propugnaban por sabotear el acontecimiento.
Macron afirmó durante su visita al Foro Económico Internacional a San Petersburgo que volvería a Rusia si su selección nacional calificaba para las semifinales.
La más reciente declaración al respecto fue expresada por los presidentes de Rusia y China, Vladímir Putin y Xi Jinping, en el comunicado conjunto emitido tras la reunión celebrada este viernes 8.
El director de la FIFA, Gianni Infantino, aseguró a una semana de la inauguración del torneo, que "Rusia está preparada al cien por cien, y que todo el mundo será testigo de la calidez y de la hospitalidad de este país y de su eficacia organizativa".
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Este año, Rusia acoge por primera vez el Mundial de la FIFA.
La competición se desarrollará del 14 de junio al 15 de julio en once ciudades: Moscú, Kaliningrado, San Petersburgo, Volgogrado, Kazán, Nizhni Nóvgorod, Samara, Saransk, Rostov del Don, Sochi, y Ekaterimburgo.
