El pasado 10 de julio, el Tribunal Supremo de España decidió suspender a Carles Puigdemont (diputado de JxCAT) y a otros cinco legisladores procesados por delitos de rebelión en el marco de la causa donde se investiga a los responsables del referéndum del 1 de octubre.
La Mesa del Parlamento de Cataluña se reunió para debatir una solución a su situación.
En concreto, los miembros del órgano rector de la cámara estudiaron la posibilidad planteada por los servicios jurídicos del Parlamento de Cataluña, una solución que pasa por que los diputados suspendidos sean remplazados de manera temporal por personas de su mismo grupo.
Además: Tribunal Supremo de España trabajará para agilizar causa contra independentistas
En esa reunión, los dos partidos anteriormente citados, que forman un Gobierno de coalición en Cataluña, manifestaron sus diferencias sobre el asunto.
Los dos miembros de ERC en la mesa votaron a favor de la sustitución temporal junto a los representantes del Partido Socialista de Cataluña (PSC).
En consecuencia, el presidente del Parlamento de Cataluña, Roger Torrent (ERC), decidió suspender el pleno previsto para este jueves, por lo que la actividad parlamentaria cesará hasta septiembre.
Según informan medios locales, el principal motivo de desencuentro es que ERC pretendía la sustitución de todos los diputados suspendidos, mientras que JxCAT pretendía dar un trato diferenciado a Puigdemont.
Además: "Esta sentencia es una derrota para la Justicia española"
Mientras no se resuelva la situación de los seis diputados suspendidos el independentismo catalán verá neutralizada su mayoría en el Parlamento de Cataluña, donde dispone de 70 de los 135 escaños que componen la cámara.
Albert Batet, portavoz de JxCAT, acusó a ERC de "querer suspender obsesivamente a Puigdemont" y de "incumplir" un acuerdo previo para dar un trato diferenciado al expresidente catalán, cuya suspensión es una "línea roja" que no están dispuestos a sobrepasar.
Por su parte, Sergi Sabrià, portavoz de ERC, acusó a JxCAT de "mentir de manera descarada" porque, según su versión, no había ningún acuerdo sobre Puigdemont.
Además: El Gobierno español evita pronunciarse sobre la extradición de Puigdemont
En consecuencia, el portavoz de ERC dio por "rota" la confianza entre los dos grupos parlamentarios, aunque aseguró que trabajarán para "coser las diferencias".
En cualquier caso, los portavoces de los grupos parlamentarios aseguraron que la crisis de confianza se limita al ámbito parlamentario, sin afectar a la cohesión en el Gobierno catalán.
A ese respecto, el conseller de Asuntos Exteriores del Gobierno catalán, Ernest Maragall, compareció ante la prensa para asegurar que la unidad del Ejecutivo "no está en riesgo".