"Park Yong-il y yo hemos estudiado la posibilidad de celebrar una nueva ronda de reuniones de familiares este año, hemos acordado estudiar la fecha y otros detalles en posteriores negociaciones", dijo Park Kyung-seo citado por la agencia Yonhap.
Del 20 al 26 de agosto en el monte Geumgangsan, Corea del Norte, tuvo lugar una reunión de familias separadas por la guerra de 1950-53, la primera desde octubre de 2015.
Los encuentros entre los familiares del Norte y del Sur —en los períodos de mejora de sus relaciones— se organizan desde mediados de los años ochenta con la ayuda de la Cruz Roja.
De ellos, casi 3.800 murieron de viejos el pasado año mientras aguardaban una oportunidad para el reencuentro.
El presidente de Corea del Sur, Moon Jae-in y el líder norcoreano, Kim Jong-un, durante su primera cumbre a finales de abril pasado, acordaron reanudar las reuniones.
El Ministerio de Unificación comunicó esta semana que Corea del Sur procurará que estas reuniones se celebren regularmente.