Los modernos radares rusos se equipan con barridos electrónicos activos, según explicó el analista Alexéi Leónkov a la cadena rusa Zvezda. Estos permiten no solamente aumentar la potencia y la sensibilidad del equipamiento, sino también hacerlo capaz de detectar varios objetivos a la vez y procesar las señales para eliminar interferencias.
Es decir, las aeronaves furtivas estadounidenses están diseñadas para ser invulnerables ante la mayoría de radares modernos, terrestres y de a bordo que utilizan la banda X del espectro electromagnético. Por su parte, los radares más antiguos usaban radiofrecuencia de Banda L.
Ahora en Rusia también existen radares que utilizan ambas bandas, y por lo tanto, algunos radares registran fácilmente aviones 'invisibles'.
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Además, los radares rusos se equipan con sistemas optoelectrónicos, así que igual pueden captar objetivos a un alcance óptico visible como en el espectro infrarrojo y ultravioleta.
"La información de que los rusos no tienen obstáculos para detectar los aviones 'stealth' en el cielo tomó por sorpresa a los estadounidenses. Ellos ya han fabricado 195 unidades de F-22, 21 bombarderos B-2 y 305 aviones F-35, gastando en total más de 170.000 millones de dólares", resumió Leónkov.
Aparte de esto, el analista constató que los sistemas rusos pueden también detectar tanques y barcos furtivos de EEUU.
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