Alexandr Zajárchenko, máximo dirigente de la autoproclamada República Popular de Donetsk (RPD) murió en un atentado con bomba.
"Mañana [5 de septiembre] en la sesión del Grupo de Contacto pediremos una investigación internacional del asesinato del líder de la RPD Alexandr Zajárchenko", dijo Grizlov al comparecer ante la prensa.
El Grupo de Contacto para Donbás, integrado por Ucrania, Rusia y la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE), se reúne el 5 de septiembre en Minsk.
Desde abril de 2014 Ucrania lleva a cabo una operación militar contra las milicias en el este de su territorio, donde se proclamaron las repúblicas populares de Donetsk y Lugansk en respuesta al violento cambio de gobierno ocurrido en Kiev en febrero del mismo año.
Kiev negó estar implicado en el asesinato de Zajárchenko que había salido ileso de al menos seis atentados contra su vida desde agosto de 2014.
Los sospechosos detenidos confesaron que el Gobierno ucraniano está detrás del crimen, según lo reveló el jefe interino de la RPD, Dmitri Trapéznikov.
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El presidente ruso, Vladímir Putin, calificó de vil el asesinato de Zajárchenko al subrayar que "aquellos quienes eligieron la vía del terrorismo, de la violencia y de la intimidación, no quieren buscar una solución pacífica y política del conflicto".
Berlín condenó el asesinato de Zajárchenko y llamó al Gobierno ucraniano y a las milicias de Donbás a participar constructivamente en las negociaciones dentro del Grupo de Contacto y la plataforma de Normandía que integran Alemania, Francia, Rusia y Ucrania.
El Gobierno francés, por su parte, instó a Ucrania y a Donbás a honrar los pactos de Minsk para solucionar el conflicto que ha dejado ya, según estimaciones de la ONU, más de 10.300 muertos.
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