La idea del montaje es hacer que el Gobierno sirio se vea culpable ante la opinión pública internacional de infringir los derechos humanos contra los habitantes de la provincia de Idlib.
Además: Tres casos en los que se usó a niños para instigar la guerra en Siria
Según el diplomático, esta información no fue una "sorpresa" para las autoridades del país, EEUU y sus aliados buscan aprovechar el presunto ataque químico para cometer otro acto de agresión contra el Estado sirio.
"Ataques semejantes fueron montados muchas veces en vísperas de cada etapa crítica en la guerra contra el terrorismo en Siria. Las fuerzas occidentales ya han decidido que debe producirse un ataque y ya habían preparado su reacción ignorando la opinión pública [en sus países]", afirmó.
El 11 de septiembre, el Ministerio de Defensa informó que equipos de televisiones de Oriente Medio y EEUU habían llegado a Idlib para grabar el montaje.
La Cancillería rusa calificó la labor de los Cascos Blancos, que se perfilan como una ONG para rescate de los civiles en las zonas de conflictos armados, como un elemento de la guerra informativa contra las autoridades de Siria.
También: Rusia: canales de TV de Oriente Medio y EEUU filmaron 9 escenas de falsos ataques químicos en Idlib
El Ministerio de Defensa considera además que ese organismo está implicado en la escenificación de los supuestos ataques químicos en las localidades sirias de Jan Sheijun en 2017 y en Duma en 2018.
