"Sí, la respuesta es afirmativa a la primera y la segunda preguntas", contestó Perry respecto a unas posibles sanciones a Nord Stream 2 y el sector ruso de energía.
Perry no precisó de qué acciones de Moscú se trata, sin embargo, declaró que el cambio de conducta permitirá a los países avanzar.
A su vez, Alexandr Nóvak, el ministro de Energía ruso, agregó que las declaraciones de EEUU sobre posibles sanciones al proyecto de gasoducto Nord Stream 2 son motivo de preocupación.
"Estamos preocupados tanto por la postura, como por las declaraciones que se hacen sobre la posible imposición de sanciones contra un proyecto absolutamente competitivo en el que están interesados los consumidores europeos", dijo.
El proyecto Nord Stream 2, impulsado por una alianza de empresas de Rusia, Alemania, Austria, Francia y los Países Bajos, prevé el tendido de dos tuberías por el fondo del mar Báltico para transportar 55.000 millones de metros cúbicos anuales de gas.
El presidente de EEUU, Donald Trump, buscó convencer a Alemania de retirarse del proyecto alegando que la hace depender de Rusia pero no consiguió su objetivo.
En la cumbre con su homólogo ruso, Vladímir Putin, en Helsinki confesó que su país competirá con el Nord Stream 2 mediante la exportación de gas natural licuado.