"Será razonable hacerlo después de que se retiren las fuerzas y los equipos, algo que Ucrania socava en Stanitsa Lugánskaya", dijo a la prensa.
Durante la Asamblea General de la ONU en Nueva York, que se desarrolla del 24 al 27 de septiembre, el presidente de Ucrania, Petró Poroshenko, volvió a plantear esta cuestión.
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Kiev trata de conseguir que se envíen cascos azules a Donbás: a mediados de marzo, el ministro ucraniano de Exteriores, Pavló Klimkin, pidió a la ONU el envío de más de 15.000 pacificadores.
Mientras, el presidente de Rusia, Vladímir Putin, señaló que avalaría el envío de cascos azules a Ucrania siempre y cuando se limitaran a garantizar la seguridad de los observadores de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE).
Desde abril de 2014 Ucrania lleva a cabo una operación contra las milicias en el este de su territorio, donde se proclamaron las repúblicas populares de Donetsk y Lugansk en respuesta al violento cambio de Gobierno ocurrido en Kiev en febrero del mismo año.