"Estábamos ante un caso muy serio de podredumbre y había que arrancarlo de raíz", dijo Burke en conferencia de prensa.
El vocero de la Santa Sede salió a explicar la expulsión de la Iglesia del exsacerdote chileno Fernando Karadima, desvinculado por el mismo papa Francisco tras su historial de abusos sexuales a menores de edad.
"El papa Francisco está actuando como pastor, como padre, por el bien de todo el pueblo de dios", señaló.
El vocero del Vaticano indicó que la expulsión de exsacerdote es "un paso más en la línea férrea del papa Francisco ante los abusos; se trata de una medida excepcional, sin duda, pero los delitos graves de Karadima han hecho un daño excepcional en Chile".
Karadima ejerció sus servicios de 1980 a 2006, y en 2011, tras una investigación canónica del Vaticano, fue condenado a una vida de "penitencia y oración".
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Por la antigüedad de los delitos cometidos, la justicia chilena determinó su prescripción y no pudo ser juzgado por tribunales civiles.
