"El crecimiento del PIB real se moderará a alrededor del 2,7% en 2018 y del 2,2% en 2019, todavía por encima del promedio de la zona del euro", mantiene el FMI en su revisión anual sobre la economía española.
De acuerdo con el análisis del FMI, la economía española "mantiene un fuerte impulso", pero "ya superó su pico cíclico" y ahora se enfrenta a "varios riesgos" que "están nublando las perspectivas a medio plazo".
Entre los desafíos más importantes, el informe del FMI destaca "la deuda pública notablemente alta", el "desempleo estructural" y "el lento crecimiento de la productividad".
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"En esta coyuntura, es fundamental fortalecer la capacidad de recuperación de la economía para resistir los choques", prosigue el informe, que aboga por "reiniciar el ajuste fiscal" y "preservar el impulso de las reformas del mercado laboral".
De manera más específica, el FMI se mostró contrario a vincular el aumento de las pensiones al crecimiento de los precios de consumo —una de las principales reivindicaciones de los pensionistas que semanalmente se manifiestan en España— si no se aplican antes medidas que permitan absorber ese crecimiento en el gasto.
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