Espacios como el J20 "nos invitan a construir consensos para un desarrollo equitativo y sostenible", afirmó Macri durante la inauguración del foro.
En ese sentido, "el imperio de la ley y la lucha contra la corrupción son tareas fundamentales", adujo.
Argentina, por su parte, está comprometida con la institucionalidad y la transparencia, añadió el jefe de Estado.
Por eso en el país sudamericano se sancionó la ley del arrepentido para los casos de corrupción y la ley de responsabilidad penal de personas jurídicas, "fundamentales para agilizar las investigaciones", y se fortaleció el programa de testigos e imputados, además de la ley de extinción de dominio que permite recuperar los bienes robados por el crimen organizado.
"Estas son algunas de las iniciativas que impulsamos" en pos "de la transparencia y el Estado de derecho", afirmó Macri.
Cuestionado en los últimos días por una aliada de la coalición gobernante, la diputada Elisa Carrió, Macri reivindicó que la justicia debe ser "la misma para todos sin privilegios".
Al margen de este asunto al que no se refirió de manera directa, el presidente se mostró optimista "porque prevalece el compromiso colectivo en cada grupo de afinidad del G20" que se ha reunido en Buenos Aires en los últimos meses.
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Argentina ostenta este año la presidencia del G20 y por lo tanto es anfitriona de todas las reuniones de grupos afines que se realicen este 2018.
El G20 está integrado por Alemania, Canadá, Estados Unidos, Francia, Italia, Japón, Reino Unido, Rusia, Arabia Saudita, Argentina, Australia, Brasil, China, Corea del Sur, India, Indonesia, México, Sudáfrica, Turquía y la Unión Europea.
Los miembros del bloque representan el 85% del producto bruto global, dos tercios de la población mundial y el 75% del comercio internacional.
