"Por desgracia, detrás de estas acciones de Kiev hay una intensión absolutamente distinta, que está lejos de los objetivos y las tareas de los acuerdos de Minsk", dice el texto.
Añade que en Ucrania afirmaban abiertamente que necesitan la prolongación de la "ley sobre el estatus" para "preservar la presión con sanciones sobre Rusia" con seguridad y crear ciertas condiciones para desplegar una operación internacional de paz de la ONU en Donbás".
Anteriormente la Rada Suprema, tras una propuesta correspondiente del presidente de Ucrania Petró Poroshenko, prorrogó la vigencia de la ley sobre el estatus especial de Donbás hasta el 31 de diciembre de 2019 con el apoyo de 245 parlamentarios sobre un mínimo de 226 votos necesarios para su aprobación.
En octubre de 2017, esta ley había sido prolongada por el plazo de un año con la condición de que entraría en vigor cuando se cumpliesen una serie de condiciones.
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El este de Ucrania lleva ya cuatro años sumido en un conflicto armado entre las fuerzas de Kiev y las autoproclamadas repúblicas de Donetsk y Lugansk, que surgieron en respuesta al golpe de Estado ocurrido en la capital en febrero de 2014.
Ucrania quiere tomar Donbás con ayuda de la OTAN https://t.co/wywTmxywgp
— Sputnik Mundo (@SputnikMundo) September 4, 2018
Pese a que desde entonces se activaron varios mecanismos para conseguir una solución política de la crisis, incluidos los Acuerdos de Minsk, hasta ahora no se ha logrado el cese de la violencia, cuyo balance la ONU estima en más de 10.300 muertos.
