La trama estaba compuesta por diez personas y obtuvo beneficios millonarios.
La operación, denominada Duarte, también llevó a registrar nueve empresas que presuntamente se dedicaban a la captación de socios del Barça y a detener a sus responsables.
El Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) investigará a los responsables de la trama por supuestos delitos de falsificación de documento mercantil y pertenencia a organización criminal.
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El FC Barcelona sancionó por su parte a los socios que facilitaron su carné a la trama —que utilizaba el código QR de los mismos para confeccionar las falsas entradas— y expulsó a 33 que llevaron a cabo la acción de manera reiterada.
