"Las sanciones se extenderán contra 322 personas físicas y 68 jurídicas", indica el comunicado.
Medvédev encargó al Ministerio de Industria y Comercio y al Ministerio de Desarrollo Económico presentar medidas para contrarrestar la influencia negativa que podrían ejercer en la gestión de las compañías rusas las sanciones impuestas a Ucrania.
"El Ministerio de Industria y Comercio y el Ministerio de Desarrollo Económico deben garantizar el equilibrio de los mercados y evitar la influencia negativa de estas medidas económicas especiales (…) en la actividad de las organizaciones rusas", especifica el texto.
Entre las personas incluidas en el listado de sancionados se encuentran el embajador de Ucrania en EEUU, Valeri Chali, la ex primera ministra Yulia Timoshenko, el ex primer ministro Arseni Yatseniuk, el portavoz del presidente ucraniano Sviatoslav Tsegolko, la vicepresidenta de la Rada Suprema Irina Geráschenko, el fiscal general, Yuri Lutsenko, el jefe del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas, Víktor Muzhenko.
El presidente de la estatal Naftogaz, Andréi Kóbolev, también cayó en la lista de sancionados.
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Además, en la lista de sanciones aparece el nombre de Olexi Poroshenko, el hijo del presidente ucraniano, Petró Poroshenko.
Las energéticas ucranianas Ukrgaz Energo y Cherkasygaz se encuentran entre las compañías sancionadas.
El 22 de octubre, el presidente ruso, Vladímir Putin, promulgó un decreto sobre las medidas económicas especiales en respuesta a acciones inamistosas de Ucrania.
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El decreto entró en vigor el día de su firma y puede anularse si se cancelan las medidas de restricción impuestas por Ucrania contra ciudadanos y entidades de Rusia.
En mayo pasado el presidente ucraniano, Petró Poroshenko, firmó un decreto que lanzó nuevas restricciones contra Rusia y prolongó las sanciones impuestas desde 2014.
A finales de septiembre pasado en la lista se incluyeron tres empresas rusas por su colaboración con las repúblicas autoproclamadas de Lugansk y Donetsk, en el este ucraniano.
Las sanciones de Ucrania están dirigidas contra casi 1.750 personas y más de 750 entidades.
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Las relaciones entre los dos países vecinos empeoraron a raíz de la reincorporación de Crimea a Rusia tras un referéndum en el que más del 96% de los votantes avaló esta opción, y el presunto apoyo de Moscú a las milicias de Donbás.
Rusia ha declarado en más de una ocasión que no es parte del conflicto interno en Ucrania ni apoya a ninguno de los bandos, sino que desea que el país vecino recupere lo antes posible la paz y la estabilidad.
