Abulhawa llegó al aeropuerto internacional de Ben Gurion con la intención de participar en un festival literario en Cisjordania, pero los funcionarios de inmigración le negaron la entrada y fue deportada a Estados Unidos.
Las autoridades aseguraron que la prohibición de su entrada no estaba relacionada con los motivos de su visita y que solo se debía a que no había coordinado su entrada.
"A fines de julio de 2015, Abulhawa llegó al cruce fronterizo de Allenby [entre Jordania y Cisjordania, controlado por Israel en su lado cisjordano] y se comportó de manera enojada, grosera y vulgar. Además, se negó a cooperar cuando se le preguntó sobre el propósito de su visita", alegó una portavoz de la Autoridad de Inmigración.
Recientemente, Lara Alqasem, una estudiante estadounidense de 22 años con abuelos palestinos, fue detenida a su llegada al aeropuerto de Ben Gurion el 2 de octubre tras ser catalogada como activista del movimiento Boicot Desinversiones y Sanciones (BDS) contra Israel.
Alqasem estuvo recluida durante más de dos semanas en un centro de detención en el aeropuerto de Ben Gurion, a pesar de haber recibido un visado de estudiante en un consulado israelí antes de su llegada.
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Finalmente, la Corte Suprema de Justicia de Israel aceptó la apelación de Alqasem contra la decisión de vetarle la entrada y el pasado 19 de octubre se le permitió entrar en Israel.