Las consecuencias de los bombardeos se pueden ver en esta fotogalería de Sputnik.
Según los informes, al menos tres palestinos y un israelí murieron en un intercambio de ataques. Más de 50 personas resultaron heridas o con traumas psicológicos. El estado de dos de ellas es crítico.
En la foto: ataque con misiles de Israel en la Franja de Gaza.
En la foto: ataque con misiles de Israel en la Franja de Gaza.
El intercambio de golpes no se detiene, a pesar de los llamamientos de la comunidad internacional y los esfuerzos de paz de Egipto, las Naciones Unidas y la Autoridad Nacional Palestina.
En la foto: las consecuencias del ataque con misiles israelíes en la Franja de Gaza.
En la foto: las consecuencias del ataque con misiles israelíes en la Franja de Gaza.
Entre los objetivos destruidos hay bases de combatientes palestinos, depósitos de armas y talleres, túneles subterráneos, sitios de lanzamiento de misiles, "tres edificios gubernamentales utilizados por Hamás para fines militares" y un "buque único utilizado por los departamentos navales" de los combatientes palestinos.
El edificio del canal de televisión Al Aqsa también fue destruido durante el ataque aéreo israelí en la Franja de Gaza.
La chispa que avivó el conflicto fue un tiroteo durante la operación militar de Tel Aviv en el enclave. El incidente ocurrió el 11 de noviembre y se llevó la vida de un oficial israelí y seis palestinos, entre los cuales, según los medios locales, había combatientes de alto rango de Hamás.
Los palestinos dicen que un grupo de sabotaje israelí que entró en la Franja de Gaza liquidó a un comandante de campo en las cercanías de la ciudad de Jan Yunis, pero fue descubierto y comprometido en una batalla durante la cual murieron varios palestinos más.
El ala militarizada de la Yihad Islámica declaró una movilización general; Israel acumuló sus fuerzas en Gaza.
Las consecuencias del ataque con misiles israelíes en la Franja de Gaza.
Una niña, en un edificio residencial alcanzado por el ataque con misiles israelíes en la Franja de Gaza.
Debido al conflicto agudizado en las fronteras del sur, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, acortó su visita a Francia, donde el centenario del fin de la Primera Guerra Mundial se conmemoraba y regresó a su país de origen.
