"La obra de Turguénev es vigente no solo para Rusia, sino para todo el mundo porque analiza al ser humano como tal, al individuo, y esos son los valores universales aplicables a todos los seres humanos", expresó Vladímir Yaroshevski, primer secretario de la Embajada de la Federación de Rusia en Cuba, y representante de Rossotrudnichestvo en la isla.
Nacido el 9 de noviembre de 1818 en Oriol, Rusia central, Turguénev estudió en las universidades de San Petersburgo y de Berlín, y su primer trabajo publicado, el poema Parasha (1843), fue bien recibido por la crítica.
Vivió parte de su vida fuera de Rusia, principalmente en París, donde mantuvo estrechas relaciones con los escritores Émile Zola, Gustave Flaubert y George Sand.
Su obra literaria incluye relatos y novelas, y también escribió para el teatro y buena parte de su producción literaria ha sido llevada al cine. Según especialistas, más de 90 películas se han filmado a partir de textos de Turguénev.
El destacado escritor ruso falleció el 3 de septiembre de 1883 y sus restos descansan en San Petersburgo.
Entre sus obras más conocidas están las novelas Rudin (1857), Nido de hidalgos (1859), Padres e hijos (1862) y Tierra virgen (1877).
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