El trauma se conoce como decapitación interna y es muy peligroso. Sin embargo, gracias a los tratamientos modernos es posible sobrevivir a este trauma.
Doctors say the "internal decapitation" Lila DeLine suffered in a car crash in August should have killed her outright. Instead, she's already back on her feet. @Marvis_WOODTV8 reports: https://t.co/9KpEMPoPap pic.twitter.com/2lFlIa3mPm
— WOOD TV8 (@WOODTV) 21 ноября 2018 г.
DeLine por poco perdió su vida el 16 de agosto en Cedar Springs (EEUU), justo al lado de su casa. Su auto destrozado llegó a parar en una zanja cercana y su esposo, Ben, corrió muy rápidamente hacia ella y le logró ajustar la cabeza para que pudiera respirar.
La decapitación interna es un traumatismo extremo de los ligamentos, músculos y articulaciones que conectan el cráneo con la columna vertebral, lo que lleva a la dislocación de la cabeza de la médula espinal. A menudo es fatal y quienes sobreviven pueden tener importantes trastornos neurológicos.
Cuando DeLine ingresó por primera vez en el hospital "no podía mover nada", dijo Gibson.
"Lo único que podía hacer era parpadear", sostuvo. "No podía moverse. No podía hablar. No podía hacer nada. Ni siquiera estaba respirando por su cuenta".
Pero gracias a su familia y a los médicos, no solamente se puso de pie otra vez sino que también volvió a sus actividades rutinarias, lo que los médicos consideraban imposible.