Según Episkopos, Rusia incorpora la novedosa arma en el contexto de la escalada de tensiones militares con la OTAN. No obstante, el propio columnista admite que no es nada sorprendente que Rusia empiece a reemplazar los viejos sistemas como parte de la modernización.
"Lo que sí debe preocupar a los observadores occidentales es la velocidad con la que los buques se van armando con el formidable sistema antisubmarinos y antitorpedos Paket".
— Sputnik Mundo (@SputnikMundo) 20 ноября 2018 г.
Rusia, por su parte, ha reiterado en numerosas ocasiones que no amenaza a nadie y desarrolla armas con fines exclusivamente defensivos.
Paket ofrece unas mejoras drásticas en el alcance y la orientación con respecto al antiguo sistema soviético de lanzamiento de cohetes antisubmarinos RBU, pero su ventaja a largo plazo es su modularidad. Es decir, las partes de Paket están diseñadas para ser mejoradas individualmente sin ninguna alteración general. El autor observa que 'paket' en ruso significa paquete o conjunto.
Todas estas características lo hacen único: no hay análogos en el mundo que puedan combinar la protección antisubmarina y antitorpedos, subraya el periodista. El sistema más cercano es el estadounidense para proteger naves de superficie de torpedos, que también utiliza sensores acústicos, y el sistema indio antitorpedo Mareech, pero ninguno de los dos incluye protección antisubmarina.
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Los Paket ya están colocados en cinco barcos Stereguschi, y pueden ser instalados en otros ocho barcos de esta clase. Asimismo, en el futuro, Rusia podrá comenzar a exportar estos sistemas.
Para Episkopos, es prematuro concluir que Rusia apuesta por Paket como su arma naval universal. No obstante, es evidente que la Armada rusa considera que Paket es una plataforma fructífera para la inversión y el desarrollo a largo plazo, concluye el autor.
