Según informaciones de la policía citadas por la cadena de televisión Globo, los agentes realizan acciones en 15 direcciones de diversos barrios de Río de Janeiro y su área metropolitana y en Juiz de Fora, una ciudad del vecino estado de Minas Gerais (sureste).
La concejala del izquierdista Partido Socialismo y Libertad (PSOL) fue asesinada a tiros el 14 de marzo junto a Anderson Gomes, el conductor del vehículo en el que viajaba.
Pasados nueve meses desde su muerte, la investigación apenas ha avanzado, aunque en diversas ocasiones se apuntó a milicianos como posibles mandantes del crimen.
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Hace unas semanas, el ministro de Seguridad Pública del Gobierno, Raul Jungmann, dijo que las autoridades descubrieron que había una trama para intentar obstaculizar las investigaciones.
Además, confirmó la tesis de que se trató de un asesinato político y aseguró que entre los involucrados hay agentes del Estado.