Los líderes de la UE celebran una cumbre en la que debatirán asuntos de política exterior y acordarán un comunicado conjunto sobre el incidente naval en el estrecho de Kerch.
"Actualmente la mayoría de los países de la UE consideran que sería contraproducente imponer nuevas restricciones a Rusia y llaman a reducir de inmediato la escalada de tensiones", dijo la fuente cercana a los debates.
Las embarcaciones ucranianas realizaron maniobras peligrosas e hicieron oídos sordos a la exigencia de parar, por lo que fueron detenidas junto con sus 24 tripulantes.
El presidente de Rusia, Vladímir Putin, calificó el incidente de provocación, señaló que entre los tripulantes de los buques infractores se encontraban dos agentes de Seguridad, quienes de hecho estuvieron dirigiendo la operación y subrayó que los guardias fronterizos rusos estaban cumpliendo su deber profesional.
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Según Putin, la provocación en el mar Negro está relacionada con la baja aceptación del mandatario ucraniano, Petró Poroshenko, quien tiene poca probabilidad de pasar a la segunda ronda de las próximas presidenciales, por lo cual necesitaba hacer algo para agravar la situación y poner obstáculos insuperables a la oposición.
