Ucrania es el factor principal que podría deteriorar la situación internacional, dijo Klaus, quien se desempeñó como presidente de la República Checa desde 2003 hasta 2013.
"Considero a Ucrania como el mayor problema", señaló Klaus al referirse a la seguridad internacional.
Sin embargo, Moscú no responde a las acciones provocativas de las autoridades ucranianas. "Esta es una decisión feliz. Si no, esta caldera podría explotar", advirtió Klaus.
Antes de convertirse en presidente de la República Checa, se desempeñó como jefe de Gobierno y presidente de la Cámara Baja de la república.
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A finales de diciembre, el actual presidente checo, Milos Zeman, prometió que su país protestaría oficialmente contra la práctica ucraniana de presentar a los criminales de guerra como héroes.
