"Es un sismo similar al que ocurrió el 7 de septiembre de 2017, porque se encuentra dentro de la misma placa tectónica, es una continuación, no es una réplica, sino que está dentro de la misma falla que se ubica dentro de la Placa de Cocos", dijo a la agencia estatal Notimex el jefe de Análisis del SSN, Víctor Hugo Espíndola.
El experto dijo que el sismo del viernes, con epicentro localizado a 37 kilómetros de Ciudad Hidalgo, Chiapas, fronterizo con Guatemala, fue producto de "una severa interacción entre tres placas tectónicas", las de Cocos, de Norteamérica y del Caribe.
En las tres horas posteriores se registraron 23 réplicas con magnitudes de entre 3 y 4, y se espera que estas aumenten pero con bajas magnitudes, como ocurre en otros movimientos telúricos.
"Ocurrió en la placa de Cocos que, en subducción, está penetrando bajo la de Norteamérica y por ahí está también la del Caribe; entonces, es una conjunción entre la norteamericana y la placa del Caribe (…), es una fractura dentro de la placa de Cocos", explicó el responsable del SSN.
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Sin embargo la profundidad y lejanía del epicentro impidió efectos en el centro del país y la capital, las zonas más pobladas.
Mientras que el terremoto del 19 de septiembre de 2017 ocurrió a unos 100 kilómetros de la capital, el temblor del viernes se registró a más de 900 kilómetros de distancia y a casi 70 kilómetros de profundidad.
El experto apuntó que el movimiento telúrico no se percibió en la Ciudad de México ni el centro del país, porque "la lejanía provocó su dispersión en el camino".
Los expertos del SSN señalan que el territorio mexicano se encuentra sobre cinco placas tectónicas: Caribe, Pacífico, Norteamérica, Rivera y Cocos.
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Rivera se sumerge bajo los estados occidentales de Jalisco y Colima, en las costas del Pacífico (sudeste), mientras que Cocos penetra debajo de la placa Norteamérica que contiene los estados de Michoacán, Guerrero, Oaxaca y Chiapas.
El SSN señala que al sur de Chiapas y en Centroamérica, la placa de Cocos se prolonga, pero chocando debajo de la placa del Caribe.
El sismo del pasado 19 de septiembre fue el desastre más mortífero de lo que va del siglo XXI en México, mientras que el ocurrido casi dos semanas antes, el 7 de septiembre, fue el cuarto más letal en este periodo con 102 víctimas.
