La enorme variedad de vehículos blindados rusos sería "demasiado fuerte para Occidente", según el experto militar Petri Makela, especialista en analizar los métodos de guerra utilizados en Rusia y Escandinavia.
Además, Makela señaló que la mayoría de los países de la OTAN ha hecho numerosas reducciones en sus Fuerzas Armadas y ahora en los Ejércitos de algunas de estas naciones se utilizan pocas variedades de tanques.
"Las tácticas rusas se basan en concentrar una fuerza abrumadora en un punto focal, algo que las pequeñas flotas de tanques occidentales tienen dificultades para contrarrestar", consideró Makela.
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De acuerdo con el experto, el Ejército ruso tiene un potencial de fuego mucho más grande que las fuerzas de la OTAN en Europa. En una guerra moderna, los tanques occidentales, aunque más avanzados, serían atacados por unidades rusas numéricamente superiores, con un apoyo masivo de artillería y misiles, lo que dejaría a los países occidentales pocas posibilidades de contraatacar, apuntó.
El experto puso de relieve, sin embargo, que pese a que actualmente las fuerzas occidentales no poseen la artillería necesaria para hacer frente a Rusia, Occidente está tomando medidas para "formar fuerzas más poderosas en Europa".
Por su parte, las autoridades rusas reiteraron en repetidas ocasiones que sus armas no amenazan a nadie y que su único objetivo es garantizar la defensa del país.
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