La fiesta comenzó al caer la tarde del 4 de febrero de 2019 y se continuará celebrando durante toda la semana. El año uno del calendario chino corresponde al 2698 antes de Cristo, señalando el comienzo del reinado de Huandgi, el Emperador Amarillo.
En México, la celebración corre a cargo de la tercera generación de familias chinas que llegaron al país, explicó a Sputnik Alexander Rangel, coordinador de mercadotecnia del barrio chino.
"El Año Nuevo es una tradición milenaria china, aquí en la ciudad de México lleva celebrándose desde 1969 como un evento privado. Llegó un momento en que a la gente le gustó tanto, que decidieron hacerlo público", relató.
Un arco chino sobre la calle Dolores señala la conexión del barrio con la Alameda de Bellas Artes, en el centro de la capital mexicana y abre el paso al epicentro del festejo. Las calles están decoradas de rojo y dorado que hacen intermitente la luz del sol sobre la peatonal.
Los comerciantes ofrecen monedas, chanchos, gatos, dragones y tortugas como amuletos. En los puestos suenan las campanas de tubos.
Rangel comentó que la asociación del barrio chino nuclea 25 locatarios que año a año ponen la fiesta para los miles de mexicanos y turistas que la disfrutan, comiendo, comprando amuletos o siendo parte de los espectáculos y este año esperan entre 20,000 y 30,000 personas durante cinco días.
Además de los grupos que representan las danzas del león chino del sur y la danza del dragón, hay demostraciones de artes marciales, tambores, además de platos y rituales típicos para los visitantes.
Fuerza leona
El 5 de febrero, con el Año del Cerdo ya instalado, la gente recorrió las calles desde las primeras horas de una tarde cálida y soleada. Pasando el arco de entrada y la pareja de leones que custodia la sección principal del barrio, los transeúntes comen arrolladitos primavera a la sombra, caminan degustando los sabores del pan hecho al vapor y consiguen las galletas de la fortuna, una probada de la tradición milenaria.
El grupo que ofrece el baile del león está integrado únicamente por mujeres.
Karina Ortega integra la comunidad femenil de la danza del león y esta es su primera presentación en público como grupo de mujeres. Se acercó a esta cultura milenaria practicando artes marciales, hasta que su maestro llevó un traje de león a la escuela, contó a Sputnik.
"Esta es una ciudad pluricultural y nosotras hemos adoptado esta tradición tan lejana y con mujeres", explicó.
La danza del león está relacionada con la abundancia y la prosperidad en China, ya que permite limpiar la mala energía, señaló Ortega. "En el show principal la danza del león termina cuando baja una lechuga que está colgada, que come y avienta hacia el público, repartiendo su abundancia".
Hay muchos relatos del origen de este ser mitológico central en las fiestas chinas, pero la Karina prefiere la versión "más romántica", según la cual el león es hijo de los dioses:
"Vive con ellos en el cielo como mascota, pero es muy juguetón. Entonces le hace una broma al dios de la guerra, quien se enoja y le corta la cabeza. La diosa de la misericordia vuelve a unir su cuerpo y su cabeza con un moño rojo, que es el que siempre trae en torno al cuerno".
El vestido para la danza del león es único y se compone de los elementos que la diosa de la misericordia le dio a su cuerpo para que volviese a la tierra a proteger a los humanos: la columna vertebral de una serpiente, el cuerno del ave bermellón (uno de los signos de las constelaciones chinas), colmillos de tigre, nariz de perro y el pakua en la espalda (los ocho estados del cambio que pueden verse en el caparazón de una tortuga).
"Es un animal terrenal pero también es un dios y es feroz", comenta Ortega, "pero una peculiaridad es que los leones son todos machos, no hay hembras", señaló.
Así comenzó el año del chancho de tierra, que según la tradición china trae abundancia y el derroche.
También te puede interesar: Así se celebra el Año Nuevo Chino en Argentina
