"Estados Unidos y sus aliados han marcado en su política exterior un vector agresivo. Están estudiando operaciones ofensivas, tales como ataque global, combate múltiple, revoluciones de colores y tecnologías de poder blando. Su objetivo es desmantelar el Estado donde no sea de su agrado, minar la soberanía, cambiar los organismos legítimos del poder estatal", declaró Guerásimov al intervenir en una conferencia dedicada al desarrollo de la estrategia militar.
El jefe del Estado Mayor General señaló que "así fue en Irak, Libia y Ucrania". "Actualmente, vemos las mismas acciones en Venezuela", agregó.
"El Pentágono abordó el desarrollo de una estrategia conceptualmente nueva de operaciones bélicas, que ya se dio en llamar 'caballo de Troya'. Consiste en utilizar activamente la capacidad de protesta de la 'quinta columna' para desestabilizar la situación y a un mismo tiempo lanzar ataques con armas de precisión contra los objetivos más importantes", señaló Guerásimov al intervenir en una conferencia sobre estrategia militar.
El alto cargo de Defensa resaltó que Rusia está preparada para contrarrestar esa estrategia y que en los últimos años "se han desarrollado los conceptos para neutralizar las acciones agresivas de enemigos potenciales".
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Denunció también que los rivales geopolíticos de Rusia se preparan para librar guerras con "un adversario de alta tecnología", con el uso de medios de destrucción de alta precisión desde el aire, el mar y el espacio, con la realización activa de la confrontación mediática.
El Consejo de Seguridad de la ONU rechazó el 28 de febrero un proyecto de resolución sobre Venezuela propuesto por Rusia, así como otro, promovido por EEUU, que Rusia y China bloquearon en su calidad de miembros permanentes.
El anteproyecto de Washington exigía la celebración de nuevos comicios presidenciales en Venezuela y la libre entrada de ayuda humanitaria en coordinación con la oposición liderada por Juan Guaidó. El borrador impulsado por Rusia, en cambio, reafirmaba el papel del gobierno de Nicolás Maduro para coordinar la llegada de ayuda humanitaria, llamaba a un diálogo político, particularmente a través del Mecanismo de Montevideo, e impugnaba el uso de la fuerza contra Venezuela.
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El 23 de enero el jefe de la Asamblea Nacional (parlamento unicameral de mayoría opositora), Juan Guaidó, se autoproclamó "presidente encargado" de Venezuela, lo que causó el agravamiento de la crisis política en el país.
Guaidó fue reconocido de inmediato por EEUU, al que se sumaron unos 50 países.
Rusia, China, Cuba, Bolivia, Irán y Turquía, entre otros países, siguen apoyando al Gobierno de Maduro.
Militarización del espacio
El jefe del Estado Mayor General ruso advirtió que Rusia responderá con medidas simétricas y asimétricas a la militarización del espacio por parte de EEUU.
"Últimamente, el Pentágono ha declarado en más de una ocasión su intención de utilizar el espacio con fines militares. Están creando a tales efectos nuevas tropas, las espaciales, lo que sienta las condiciones para la militarización del espacio", dijo Guerásimov.
En su intervención, el viceministro afirmó también que EEUU mantiene su línea dirigida a expandir la presencia militar cerca de las fronteras de Rusia, así como desmantelar el sistema de acuerdos que limitan y reducen las armas, lo que acaba por perturbar la estabilidad estratégica.
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Como ejemplo, Guerásimov mencionó la retirada unilateral de EEUU del Tratado ABM sobre misiles antibalísticos, en 2002, la reciente suspensión del Tratado INF sobre misiles de alcance medio y más corto y la eventual negativa de prolongar el nuevo Tratado START sobre la reducción de armas estratégicas ofensivas.