"La crisis humanitaria se agrava, 300.000 en riesgo de muerte y tres millones en riesgo sanitario severo", afirmó Guaidó en Buenos Aires, en una conferencia en la que estuvo acompañado del ministro de Relaciones Exteriores de Argentina, Jorge Faurie.
"Que sepa el mundo que a pesar del asedio, de la persecución y de la tortura incluso, volvemos a las calles en los próximos días, volvemos a resistir".
Guaidó añadió que el Producto Interno Bruto de Venezuela se redujo 53% en los últimos cinco años, y que entre 14 y 17% de la población ha dejado el país "producto de la crisis".
El diputado agradeció "la cumbre humanitaria" que se celebró en Cúcuta, Colombia, el pasado 23 de febrero, cuando se vio "cómo el supuesto bloqueo a Venezuela no era más que una excusa de un régimen que no le preocupa la vida de los venezolanos".
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"El dilema en Venezuela es entre dictadura y democracia, entre pobreza y miseria y progreso y prosperidad", afirmó el referente opositor.
La gira sudamericana que comenzó Guaidó en los últimos días tiene por fin ver cómo "terminar la usurpación y comenzar la transición", informó.
Respaldo
"Esta gira no es solo para hablar del cese de la usurpación, sino también del apoyo y respaldo en la crisis de Venezuela", añadió.
Hasta el momento, prosiguió, dijo que tiene "el respaldo de 60 países".
El referente opositor agradeció además la acogida de los argentinos a los miles de venezolanos que llegaron a vivir al país sudamericano.
"Agradecemos el gesto que han tenido con los venezolanos", señaló.
La comunidad venezolana residente en Argentina que apoya a Guaidó, se convocó en las inmediaciones de la Cancillería, en la Plaza San Martín, para darle la bienvenida al dirigente opositor.
Guaidó salió de su país el 22 de febrero rumbo a Colombia, donde permaneció hasta el martes 26 y luego continuó una gira por América del Sur que lo llevó a Brasilia y a Asunción, donde fue recibido por el presidente de Paraguay, Mario Abdo Benítez.
Al mismo tiempo, el presidente de Ecuador, Lenín Moreno, anunció que recibirá este sábado a Guaidó en Quito.
Guaidó había sido elegido el 5 de enero presidente de la Asamblea Nacional, parlamento unicameral en desacato desde 2016, designación que fue anulada por Tribunal Supremo el 21 de febrero.
El presidente Maduro, quien asumió su segundo mandato el 10 de enero tras unas elecciones que la oposición boicoteó, calificó la declaración de Guaidó de intento de golpe de Estado y responsabilizó a Estados Unidos de haberlo orquestado.
Guaidó fue reconocido de inmediato como presidente interino por Colombia y Estados Unidos, a los que se sumaron unos 50 países, mientras que Rusia, China, Cuba, Bolivia, Irán y Turquía, entre otros, mantienen el apoyo al Gobierno de Maduro.
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México y Uruguay, por su parte, se niegan a reconocer a Guaidó, se declaran neutrales y proponen un diálogo entre las partes para superar la crisis.