"Gobiernos europeos y EEUU continúan interfiriendo descaradamente, el delito debería elevarse a injerencia ilícita –guerrerista", escribió Arreaza en su cuenta personal de la red social Twitter.
El Departamento Jurídico del Bundestag alemán calificó las acciones de su gobierno sobre asuntos internos de Venezuela como INJERENCIA ILÍCITA. Aún así, gobiernos europeos y EEUU continúan interfiriendo descaradamente. El delito debería elevarse a INJERENCIA ILÍCITA —GUERRERISTA
— Jorge Arreaza M (@jaarreaza) 4 марта 2019 г.
Este 4 de marzo, los embajadores de Alemania, Rumanía, Portugal, Francia y Países Bajos, esperaron en el aeropuerto internacional Simón Bolívar de Maiquetía, estado Vargas (norte), al diputado Juan Guaidó, autoproclamado presidente de Venezuela, quien arribó al país tras realizar una gira por países suramericano.
El jefe de la diplomacia venezolana recordó que un grupo de expertos dijo a principios de febrero en el parlamento alemán (Bundestag) que reconocer a Guaidó podría significar una intromisión en los temas internos del país sudamericano.
"El Departamento Jurídico del Bundestag alemán calificó las acciones de su Gobierno sobre asuntos internos de Venezuela como Injerencia Ilícita", enfatizó Arreaza.
Guaidó llegó a la nación, pese prohibición de salir del país, a pedido de la Fiscalía General que sustancia una investigación preliminar en su contra por la supuesta comisión de delitos contra la Constitución.
El 23 de enero, dos días después de que el TSJ anulara su designación, Guaidó se autoproclamó "presidente encargado" de Venezuela, apelando a un artículo constitucional que prevé esa figura.
El presidente Nicolás Maduro, quien asumió su segundo mandato el 10 de enero tras unas elecciones que la oposición boicoteó, calificó la declaración de Guaidó de intento de golpe de Estado y responsabilizó a EEUU de haberlo orquestado.
Apenas autoproclamado, Guaidó fue reconocido de inmediato por los EEUU, a los que se sumaron unos 50 países.
