"Nosotros no contratamos 'bots' (robots), no tenemos granjas en las redes para generar distorsiones en la red, ni contratamos empresas para generar 'fake news' (noticias falsas) ni campañas de odio", dijo a esta agencia vía telefónica el titular de Comunicación Social de la Presidencia.
Esa denuncia coincide con el resultado de una investigación del Instituto Tecnológico de Estudios Sociales de Occidente (Iteso), que detectó "campañas de ataque capaces de construir estrategias de censura y acoso online a través de la diseminación de una idea, a través de la red social Twitter y hashtags (etiquetas), que hacen las veces de agentes polinizadores, encargados de esparcir de manera capilar un mensaje".
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El mensaje, en este caso, es "peligroso para cualquier democracia: mantener a raya a quienes critican al presidente", indican las conclusiones del informe "Democracia, libertad de expresión y esfera digital, análisis de tendencias y tipologías en Twitter: el caso de la #REDAMLOVE".
El portavoz del presidente dijo a Sputnik que "estamos en contra de estrategias que siembren discordia, y de campañas que socavan la democracia".
Por su parte, el oficial de Protección y Defensa de Artículo, Sebastián Salamanca, dijo a Sputnik que "notamos que el presidente ha venido utilizando un lenguaje cada vez más agresivo contra la prensa, con calificativos generalizados, y que los periodistas y medios descalificados por López Obrador reciben intimidaciones y hostigamientos en redes sociales".
Salamanca, de la organización que lleva el nombre del artículo consagrado a la libertad de expresión en la Declaración Universal de Derechos Humanos, advirtió que "no es lo mismo un presidente que descalifique a la prensa en Suiza, a hacerlo en un país donde matan a por lo menos 10 periodistas cada año como México".
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Este es el país "más peligroso para ejercer el periodismo en el continente; cada respuesta hostil a la cobertura de prensa coloca a los periodistas en condición de riesgo de recibir ataques", puntualizó.
Petición al presidente
Salamanca añadió que "Artículo 19 le pide al presidente que rechace las intimaciones contra quienes cubren sus conferencias, porque los profesionales que hacen preguntas incómodas o críticas han terminado recibiendo agresiones de sus seguidores".
Aclaró al mismo tiempo que "ni Artículo 19 ni el ITESO están acusando al presidente de estar detrás de los ataques; jamás decimos que el Gobierno está detrás de esos ataques".
Lo que la organización independiente señala, es que "al presidente no le corresponde ejercer como un tribunal de ética periodística o de analista de calidad de contenidos, su papel, de acuerdo a los estándares internacionales es garantizar el ejercicio de la libertad de expresión, el derecho a preguntar, opinar, criticar y estar en desacuerdo con el Gobierno".
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López Obrador tiene derecho a expresar sus desacuerdos, "pero sin acusar en forma general como corrupta a la prensa opositora, no es el papel de un jefe de Estado, sobre todo en un país con el récord violento de México", puntualizó Salamanca.
A una pregunta sobre el informe del ITESO, el presidente que se define como liberal, replicó que los conservadores "son especialistas en la simulación, ahora resulta que este estudio nos cuestiona porque hablamos de la prensa conservadora, de la prensa fifí", replicó.
Descalificó a quienes son opositores y manifiestan "soy independiente, soy objetivo, soy profesional, no tengo partido, no represento a nadie".
Lo malo sería, prosiguió, "si de parte del Gobierno hubiese una actitud de persecución"; pero el Gobierno "no va nunca a faltarle el respeto a los medios, mucho menos a perseguir a nadie, a coartar la libertad de expresión, de manifestación de las ideas; pero vamos a ejercer nuestro derecho de réplica", advirtió.
El informe del centro de estudios superiores con sede en Guadalajara señala que esas técnicas comenzaron "durante la gestión de Enrique Peña Nieto (2012-2018), cuando fueron constantes los casos del uso de estas estrategias".
Estas plataformas "pueden ser herramientas de producción y control de cierto ambiente hostil que impide la conversación", puntualiza.
López Obrador llegó a 100 días de su mandato el 10 de marzo pasado, con niveles de popularidad alrededor de 70 puntos.