En declaraciones a Radio Sputnik, calificó el gesto de la Eurocámara como "una jugada estratégica para desviar la atención de dónde están realmente los problemas en Europa", los cuales son fruto, en particular, de que políticos europeos no tienen "un gran valor añadido".
"Su decisión más complicada que han podido tomar ha sido con qué mano cogen el yogurt por la mañana de la nevera", señaló, al agregar que "ni siquiera lo compran ellos", sino que lo hace "su mamá".
De allí que no pueden hacer nada o incluso son causantes de los problemas que apuntan a "la desintegración de Europa".
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Respecto a cuáles son los problemas más candentes de la UE, mencionó que los países comunitarios no tienen "un interés común", sino que cada uno "tira de su cuerda y por sus propios intereses".
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El último de los "grandes problemas" que tiene la UE es la "injerencia" de algunos países miembros "en la política" de otras naciones comunitarias, indicó José Manuel Opazo, al señalar el caso de Alemania, cuya empresa T-Systems cobró más de 300 millones de la Generalitat catalán para ayudar a "los independentistas catalanes" a "romper España", encargándose de crear "estructuras de Estado".
El analista español Javier Colomo Ugarte, doctor en Geografía e Historia, también diagnosticó en declaraciones a nuestra emisora "una tendencia" a la "debilidad de Europa", algo que "se irá acentuando".
