"Estamos sorprendidos por la reacción del presidente de la Cámara de Representantes de Colombia, Alejandro Chacón, a la declaración del Consejo de la Federación en relación con la situación en la República Bolivariana de Venezuela transmitida al Parlamento colombiano por canales oficiales", dice el comunicado de Kosachov publicado en la web del Senado ruso.
Previamente, el presidente de la Cámara de Representantes colombiana, Alejandro Chacón, declaró que la declaración de los parlamentarios rusos representa "una amenaza directa al Estado de Colombia".
"Es una advertencia al Congreso, porque finalmente somos nosotros los que permitimos al Gobierno si se hace o no algún tipo de intervención militar en territorio extranjero. Claramente es una amenaza directa al Estado de Colombia, por eso estamos confirmando por qué nos llegó de forma directa al Capitolio y no a través de los canales diplomáticos", dijo Chacón en una entrevista con el diario El Tiempo.
"Y en ninguna parte, a excepción de Colombia, esta declaración causó malentendidos y, tanto más, se interpretó como una amenaza", subrayó el senador ruso.
Agregó que la postura de Rusia con respecto a Venezuela "no contradice el derecho internacional, ni la Carta de la ONU, y, además, no puede interpretarse como una amenaza por parte de ningún Estado que respete la soberanía de Venezuela y no planifique una intervención militar en su contra".
"Por eso una reacción tan nerviosa de Bogotá (y anteriormente el Ministerio de Relaciones Exteriores de Colombia también expresó su preocupación), por supuesto, plantea cuestiones", subrayó Kosachov.
Al mismo tiempo, el senador subrayó que los parlamentarios rusos están listos para abordar la crisis venezolana con sus compañeros de Colombia, así como con todas las partes interesadas.
El 29 de marzo pasado, la embajada rusa en Bogotá remitió al Congreso colombiano la misiva, en la que los parlamentarios rusos expresan su posición respecto del intento de pasar desde Colombia hacia Venezuela ayuda humanitaria donada por EEUU el 23 y 24 de febrero pasado.
La misiva salió a la luz en la prensa colombiana el 2 de abril, lo que motivó la reacción del Ministerio de Relaciones Exteriores del país sudamericano que rechazó la declaración del Senado ruso.
El canciller colombiano Carlos Holmes Trujillo indicó que "las acusaciones contenidas en dicha declaración no corresponden a la realidad y constituyen una distorsión de la posición de Colombia".
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Por su parte, la embajada rusa declaró que el Gobierno de Colombia interpretó erróneamente la carta del Consejo de la Federación (Senado de Rusia).
La Embajada subrayó que en ningún momento buscó poner en tela de juicio "el derecho soberano de las autoridades colombianas a actuar en el escenario internacional conforme con sus principios, obligaciones y responsabilidades" e indicó que comparte con el Ejecutivo colombiano la necesidad de que Venezuela busque una salida pacífica a su crisis.
