En esta oportunidad,los sondeos de opinión dan hasta un 70% de votos a favor de Zelenski.
En los días previos, Poroshenko ha intentado acortar la distancia comunicándose con los medios y enviando un mensaje a la juventud, dando entrevistas televisivas, despidiendo funcionarios impopulares. Pero parece que nada de esto le alcanzará para alcanzar a su rival.
En un estilo opuesto, Zelenski ha hecho una campaña alejado de las cámaras, sin dar entrevistas. Este humorista, que es muy popular por su programa televisivo "El servidor del Pueblo", parece encaminado a ganar siguiendo el estilo del brasileño Jair Bolsonaro.
El analista Guadi Calvo compara a Zelenski con el presidente de Guatemala, Jimmy Morales, un actor cómico, de derecha, que llevó la embajada en Israel de Tel Aviv a Jerusalén.
"Hay un desgaste de los político a nivel global y emergen estas figuras que de pronto son altamente peligrosas, porque no sabemos a dónde pueden llegar", opina Calvo. "El viejo político, el político de raza, el estudioso, el conocedor, se ha degradado bastante", lamenta.
En Ucrania, es notorio el desencanto en la juventud, que hace seis años promovió las protestas de la plaza Maidán en 2013. Estas culminaron con la destitución del presidente Víktor Yanukovich y terminaron llevando a Poroshenko a ganar las elecciones presidenciales del 25 de mayo de 2014.
"Ese desánimo de la juventud, hacia Poroshenko tiene un fundamento muy claro, la frustración de todas las promesas que se habían hecho", señala Calvo.
"Tras cinco años de Gobierno, Poroshenko se va con muchas deudas hacia su electorado.Ha incentivado el nacionalismo, las guerras en el este, la degradación de la economía, son muchos puntos en contra para este empresario, aliado fundamental de Europa y Estados Unidos, que no ha podido hacer prácticamente nada en su Gobierno", señala.
"El pueblo ucraniano va a optar por sacárselo encima lo más rápido posible", cree el analista argentino.
En estos cinco años de Gobierno, Poroshenko no logró resolver el conflicto en el este del país, surgido a partir de 2014, con las actitudes nacionalistas del nuevo gobierno en Kiev.
El 16 de marzo de 2014, la península de Crimea decidió mediante un referéndum su reincorporación a Rusia con un 96% de votos a favor. A renglón seguido, las regiones de Lugansk y Donetsk, fronterizas con Rusia, se proclamaron como repúblicas independientes en sendos plebiscitos.
Los acuerdos de Minsk de 2014 y 2015, que buscaron regular el conflicto, han avanzado muy poco desde entonces.
Para Calvo, desde el punto de vista de su programa, Poroshenko y Zelensky no tienen muchas diferencias: ambos dicen que el país debe continuar su curso hacia la Unión Europea y hacia la OTAN.
En cuanto a la política interna, "ambos son neoliberales", pero Poroshenko ya fracasó. "Zelenski promete prácticamente lo mismo, pero no hay muchas diferencias", es "el mismo discurso envuelto en forma diferente", apenas "un cambio de caras", apuntó.
"Van a lanzar a Ucrania hacia el iceberg nuevamente. No creo que [Zelenski] pueda presentar algo diferente en el fondo", concluyó.
En cuanto a la política de la OTAN hacia Ucrania, "eso no cambia". La Alianza Atlántica y los EE UU "han seguido avanzando hacia la frontera rusa lo máximo posible", y "han concentrado un potencial militar muy fuerte" en los países del Este.
Por eso, para Calvo, a pesar del cambio político que posiblemente tenga lugar en Kiev este domingo, "al poco de rodar, se van a dar cuenta que simplemente cambiaron figuritas".
